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| François Hollande, Presidente electo de la República de Francia |
Con la victoria del socialdemócrata François Hollande en Francia, en las elecciones presidenciales, algo cambia, y algo puede cambiar en Europa. Quedaron vivos para la segunda vuelta de las presidenciales Hollande en primer lugar y el presidente saliente, Nicolás Sarkozy. Finalmente, y como adelantaban todas las encuestas y sondeos electorales, ha sido el candidato de izquierdas el que se llevó la mayoría de los votos y por tanto la victoria electoral. Tras diecisiete años de gobiernos conservadores los socialistas franceses vuelven al palacio del Elíseo. Sarkozy ha caído a las primeras de cambio, un mandato. En mi opinión, se estiraba tanto porque no llegaba, pobre, no hay alzas para engrandecer la talla de los políticos. La propia personalidad desbocada y huracanada de Sarkozy, su principal obstáculo para ser Presidente de la República de Francia. Aparte, Marine Le Pen, a la postre su auténtica rival, le ha sabido ganar la partida en cuanto a la movilización de la derecha en Francia. Su táctica quizá de incluso más frutos en las legislativas de Junio.
Han sido unas elecciones fundamentales por todas las implicaciones que contienen. En principio, y lo que más nos puede interesar a los españoles es que François Hollande, a diferencia de Sarkozy, no comparte la política aplicada por la Canciller alemana Ángela Merkel de recortes y restricción de gasto para combatir el déficit público. Por contra, Hollande pide algo más de flexibilidad, que no indulgencia. Además, aboga por un plan de crecimiento, cosa que parece que ya han notado como necesaria hasta en Alemania, que contribuya a la expansión económica europea, ahora estrangulada por la falta de actividad, consumo, y por los recortes públicos. Si ésto es así, y finalmente Hollande consigue suponer un contrapunto a la severidad y rigurosidad de la gobernante germana, podría suponer una buena noticia para España ya que las exigencias de ajuste fiscal, o recortes, se suavizarían algo, y no sería una carrera contrarreloj para desinflar el abultado déficit en tiempo récord, consiguiendo algo más de paciencia para suavizar ese duro tránsito.
Pero claro, para ello es necesario que en la consecución de estos fines, el nuevo presidente de Francia haga valer verdaderamente su peso y el de su país ante Alemania, puesto que Francia no está tan mal como países como Italia, Grecia, Portugal, Irlanda, incluso España. ¿Sacará la cara Hollande por estos países?. ¿Verdaderamente lo haría por convicciones ideológicas si es que Francia no necesitara disminuir tanto la tan traída austeridad?. Quién sabe.
En cualquier caso, y prosiguiendo en el análisis en clave nacional de los resultados franceses, el primero en jalear la victoria de Hollande en Francia ha sido el PSOE a través de Rubalcaba y de Elena Valenciano. En fin, qué decir, ya me gustaría a mí ver a los miembros del PSOE cantar el himno de España, caso de que tuviera letra, o enarbolar en sus mítines electorales y actos de campaña la bandera de España, como hace Hollande en Francia sin reparo ni vergüenza alguna. Hay diferencias. En cualquier caso, y si François Hollande es tan listo como su "partenaire", Monsieur Zapatero, Francia se irá también al traste, y ya seremos más los países atormentados por la crisis económica, aunque ya se sabe, mal de muchos...
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| En el PSOE, menos la bandera de España, la que haga falta |
Quisiera acordarme aunque sea brevemente de Grecia, país al que los europeos y el mundo entero, particularmente lo que queda de la civilización occidental, tanto y tanto le debe. Según dicen las fuentes de información, será una misión complejísima la tarea de formar gobierno en el país heleno. Otra dificultad añadida a las muchas que ya castigan sin piedad ni compasión a este país. Lo peor es que los únicos que no tienen culpa de nada, como en todos los demás países, en este caso los griegos, lo están pasando verdaderamente mal.
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| Nikolaos Michaloliakos, jefe del partido Amanecer Dorado |
